Mi dulce hogar en Chelsea...

Puf... el capítulo de encontrar alojamiento fue un auténtico Tos-tón... (que ni las rebanadas del pan bimbo, vamos) Después de las aventuras en la YMCA (sí, como la canción) encontré un sitio provisional en Chelsea que es un barrio muy chulo, el barrio gay, muchas discotecas y muy seguro. Pero era provisional, porque iba a venir a la habitación una inquilina argentina en enero y al final... a la tía la destinaron a California y me pude quedar! Me hizo tanta ilusión que pinté mi cuarto y todo. La inquilina anterior... la muy cerda había dejado la habitación a medio pintar medio azul medio blanca y había pegado posters con supergen. Así que manos a la obra, a pintar como el de karate kid, algún mueble que otro, y qué bonita y qué rosa me quedó! (ole Rosa!! mira cómo me acuerdo de tí, suki suki!)Tengo dos roommates Lucía y Florence very very nice y arriba hay una terraza en el edificio desde donde veremos los fuegos artificiales en Nochevieja. En las fotos, la terraza, mis roommates con Nicole, la hermana de Nadine, and the pink wall